¿Por qué usar Plastiteja?
Los materiales para techo tienen que contar con protecciones adicionales, ya que esta parte de un recinto es de las más importantes debido a que protegen a toda la estructura, tanto la que le da forma a la obra, como al interior de dicho recinto. Por ello es importante escoger que clase de material se tiene que utilizar para colocar un techo. Una de las mejores alternativas para esto, es la lámina plastiteja, elemento que tiene una similitud física grande con las tejas de asbesto y de barro tradicionales.
La similitud entre las tejas de barro y asbesto con este producto solo pasa por la apariencia, debido a que la plastiteja cuenta con una composición mucho más resistente, que le permite no solo ser más durable que cualquier teja tradicional, sino que también tiene un costo más accesible para todo el púbico. Es por ello que es una de las mejores alternativas, no solo para iniciar un proyecto, sino para sustituir completamente a las tejas de barro y asbesto, que tienen una durabilidad reducida.
Estructura resistente
Otra de las ventajas de la plastiteja es que no resguarda malos olores. En muchas ocasiones, las tejas tradicionales desarrollan moho en su cubierta, así como otra serie de elementos que se asientan en su superficie, debido a que estos materiales absorben el agua, lo que propicia un ambiente ideal para el crecimiento de flora en un sitio que la mantiene lejos de depredadores, por lo que puede crecer libremente. En cambio con la instalación de plastiteja, esto se evita de manera permanente.
Otra de las ventajas de este producto, es que está hecha con polietileno mineralizado, lo que no solo le da la posibilidad a este producto de ser un elemento que se puede reciclar pasado su periodo de vida de más de 25 años, sino que también es un elemento que tiene una gran relación con los cambios de clima, tanto con excesos de calor, así como para los climas en donde la presencia de frío sea constante En ninguno de los dos, la plastiteja sufre afectaciones, aún estando bajo climas extremos.


